Autor: Equipo Editorial INTAGRI
La alcachofa (Cynara cardunculus) es una de las especies hortícolas procedentes de la familia Asteráceae (compuestas), posee una gran adaptabilidad, ya que se puede producir en condiciones frías y en todo tipo de suelos. La producción de esta planta en México se presenta principalmente en los estados de Guanajuato, Michoacán y Puebla, destinándose principalmente a la exportación y a la industria de procesados. Para cubrir la demanda del mercado es necesario controlar todos los factores que inciden en la producción, uno de gran importancia es el correcto manejo de las plagas.
Plagas de importancia
Figura 1. Daño por barrenador en tallo de alcachofa Foto: Ministerio de Agricultura, España |
Barrenador (Gortyna xanthenes): insecto del orden Lepidóptero capaz de parasitar en su totalidad a la planta, se le considera la plaga de mayor importancia. Los adultos hacen la puesta de los huevos en las grietas del tallo al nivel del cuello de la planta, al eclosionar las larvas se introducen rápidamente dentro del tallo alimentándose de él. Al seccionar el tallo se pueden apreciar las larvas dentro de él, desde la base de la planta hasta el capítulo floral, dejando al fruto inservible para comercializar. La planta comenzará por debilitarse, perderán la turgencia en las hojas y el tallo, posteriormente se puede ver la podredumbre en el tallo y la base floral, esto debido a todo el tejido dañado por la excreta y mordedura de las larvas.
Se considera el control químico como la mejor acción de control para esta plaga. La aplicación de insecticidas de contacto ha dado buen resultado en el control de los insectos adultos que se han encontrado en la superficie de la planta. Se recomienda la aplicación de insecticidas fosforados como clopirifos y profenofos que además tiene un efecto acaricida, el uso de piretroides como cipermetrina y flucitrinato también ha mostrado buenos resultados en el control de adultos.
La presencia masiva de adultos en un periodo relativamente restringido permite la posibilidad de controlar en ese momento la fecundación de las hembras mediante la utilización de feromonas sexuales.
Como medios de lucha cultural es recomendado deshacernos de la parte aérea que ha sido dañada, se puede pasar el rotovator después de la última recolección de los frutos, con esto se pueden llegar a eliminar larvas y pupas presentes en los tallos y hojas. Se debe considerar que esta práctica debe hacerse de manera superficial para no dañar las raíces y yemas basales que han de dar lugar a la próxima cosecha.
Áfidos
Dentro de los áfidos más problemáticos se encuentran los pulgones Brachycaudus cardui y Aphis fabae que parasitan la parte aérea del cultivo. Aphis fabae suele ser el que ocasiona mayor daño debido a su resistencia a las temperaturas bajas y a su forma de alimentación en donde al succionar el jugo vegetal de la planta reduce su capacidad fotosintética. Este insecto pertenece al orden Homóptera con capacidad de parasitar numerosas especies vegetales.
En la alcachofa los daños se presentan en las hojas, éstas suelen enrollarse, perder el color verde volviéndose secas de color marrón y carentes de actividad fotosintética. La planta presentará debilitamiento y retraso en el crecimiento y desarrollo. Además de que pueden atraer hongos como la “fumagina” debido a la segregación de melaza de las larvas al alimentarse.
Para el control de pulgones en la alcachofa se pueden encontrar varias vías, la biológica ha dado buenos resultados mediante el uso de depredadores como neurópteros (crisopas), coccinélidos, chinches depredadoras (antocóridos y míridos), larvas de dípteros, sírfidos, así como parasitoides himenópteros como Lysiphlebus testaceipes. El uso de jabones potásicos resulta una buena medida de control de forma foliar sobre la alcachofa. En cuanto a control químico, algunos de los ingredientes activos que han sido utilizados y dando buenos resultados podemos encontrar etíofencarb, deltametrina, ometoato, heptenofos y endosulfán; siempre cuidando el seguimiento a instrucciones de etiqueta y respetando los límites de residuos, intervalos a cosecha y dosis.
Figura 2. Colonia de Aphis fabae en la base floral Foto: Ministerio de agricultura, España |
Ácaros de la alcachofa
La araña roja (Tetranychus urticae) es la especie de ácaros a la cual se le debe de poner especial atención en la producción de alcachofa, ya que suele atacar al cultivo previo a la fecha de cosecha.
A partir del mes de mayo cuando las temperaturas aumentan y el ambiente seco se prolonga, empiezan a proliferar por el envés de las hojas focos de araña roja. Se aprecian hojas amarillentas que posteriormente se tornarán blanquecinas y necróticas.
Si la infestación es grave las hojas se pueden caer, los frutos se desprenden prematuramente, poseen apariencia de marchitamiento y manchas amarillas y marrones, que imposibilita su venta en el mercado.
Los tratamientos más efectivos para el control de araña roja son las aplicaciones biológicas de ácaros fitoseidos como Neoseiules californicus y Phytoseiulus persimilis, así como chinches depredadoras (Nesidiocoris tenuis). El control químico solo se recomienda si se considera rentable o a menos que se quiera mantener la planta para los siguientes ciclos. Los ingredientes activos más utilizados son abamectina, azufre, dicofol, tetradifon y hexitiazox, los cuales pueden aplicarse de manera general o localizada.
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Cita correcta de este artículo
INTAGRI. 2021. Plagas en Alcachofa. Serie Fitosanidad, Núm. 137. Artículos técnicos de INTAGRI. México. 3 p.
Literatura consultada
- Ortega, R, G. 2019. Plagas, Enfermedades y Accidentes de la Alcachofa. Servicio de Investigación Agroalimentaria, Zaragoza. 52 p
- Merino, I. 2016. Plagas y Enfermedades de la Alcachofa. Ministerio de Agricultura Pesca y Alimentación, España. 40:22-26
- SINAVIMO. 2013. Aphis fabae. Sistema Nacional de Vigilancia y Monitoreo de Plagas. 2p
- SADER. 2016. La Producción Anual de Alcachofa en México. Secretaria de Agricultura y Desarrollo Rural. 14 p
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