Importancia económica de los nemátodos
Los nemátodos son “gusanos”, en su mayoría microscópicos, con dimensiones que van de 0.25 mm a 3.0 mm de largo. Comúnmente son de forma cilíndrica, estrechos hacia la cabeza y cola. Los nemátodos fitopatógenos atacan a gran cantidad de cultivos, causando pérdidas de millones de dólares cada año a los agricultores. Aun cuando estas causas han sido ampliamente reportadas, es muy común que los productores no estén conscientes del tamaño de las pérdidas, ya que nos son fácilmente detectables y gran parte de los perjuicios causados normalmente se atribuyen a otras causas.
El problema de nemátodos bajo condiciones protegidas, en realidad es muy frecuente si no se toman las medidas necesarias para su prevención. Los nemátodos de mayor importancia económica en invernaderos incluyen especies de los géneros: Meloidogyne, Pratylenchus, Radapholus, Aphelenchoides y Ditylenchus. El origen del problema con nemátodos bajo estas condiciones se debe a factores como: uso de semillas infectadas, material vegetativo contaminado, cultivo en suelo contaminado, uso de sustrato contaminado, uso de implementos o herramientas contaminadas, entre otros.
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Figura 1. Pratylenchus penetrans. Nemátodo fitopatógeno. Foto: University of California. |
Alimentación y relaciones parásito-huésped
Los nemátodos pueden alimentarse de los tejidos vegetales de fuera de la planta (ectoparásitos), o del interior (endoparásitos). Si la hembra adulta se mueve libremente a través de los tejidos del suelo o de la planta, la especie se dice que es "migratoria”; hay especies en las que las hembras adultas se hinchan y permanecen inmóviles en la raíz, se les denomina "sedentarias". Todos tienen alguna forma de estilete oral o “lanza”, que utilizan como una aguja hipodérmica para perforar la pared celular del huésped. Los nemátodos inyectan enzimas antes de su alimentación, estas enzimas digieren parcialmente los contenidos de la célula antes de que entren al intestino del nemátodo, así la mayoría de las lesiones que los nematodos causan está relacionada de alguna manera con la forma de alimentación.
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Figura 2. Sistema radicular infectado por Meloidogyne sp., en comparación con sistema radicular sano. Foto: University of Maryland. |
Diagnóstico de daños por nemátodos
A simple vista es muy difícil saber si los nemátodos han iniciado un daño significativo al cultivo. Si se carece de un historial que diga la especie y densidad de la plaga, se puede determinar mediante análisis de laboratorio de suelo y/o de muestras de plantas. Otro problema que complica más aun el diagnóstico, es la diferencia de síntomas que genera cada especie, aquí se deben tomar los más comunes y llevar un registro. Hay que considerar que estos organismos se mueven muy poco en el suelo, pero los manchones donde se encuentran van creciendo año con año, su diseminación también es causada por las prácticas de labranza, nivelación e incluso el riego.
Durante el desarrollo del cultivo se puede apreciar un mal desarrollo de la parte aérea en las plantas, esto puede ser indicador de daños en la raíz, puesto que se asocia a un deficiente suministro de agua y nutrimentos (clorosis u otras coloraciones anormales, raquitismo de la parte superior, marchitez, etc.). En el caso de plantas leñosas puede suceder que haya caída de follaje y cuando comienzan los nuevos brotes son muy pequeños y tienden a caer nuevamente, la ramas pequeñas comienzan a morir mientras se va generalizando a las ramas más grandes; asimismo se generan problemas con malezas a tal grado que el cultivo de interés ya no puede competir con estas. En el suelo, las raíces pueden presentar agallas, lesiones necróticas y pudriciones, que detectándolas tempranamente pueden ayudar a un buen diagnóstico y control.
Control de nemátodos en condiciones protegidas
A continuación se mencionan algunos métodos para prevenir, o en su caso, disminuir la presencia de nemátodos en la producción de cultivos bajo invernadero.
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Figura 3. Equipo de desinfección de suelos en invernadero utilizando vapor. |
1. Los métodos de desinfección por calor han mostrado ser estrategias muy eficaces para el control de nemátodos, pues estos microorganismos suelen ser muy sensibles a los cambios de temperatura. Si se realizan tratamientos de 30 minutos a unos 45-50 °C aproximadamente pueden controlarse algunos hongos y nemátodos, pero para considerar el tratamiento como pasteurización eficaz (eliminar cualquier patógeno), el tratamiento debe ser en el orden de los 82 °C aproximadamente y de 30 minutos. El vapor es eficaz en el control de plagas, y se utiliza ampliamente tanto en suelos como en sustratos.Las desventajas de este método son: su alto costo, lo que impide utilizarlo en ocasiones; y si se exceden los 93 °C, se puede llegar a destruir la estructura del suelo y se liberan sustancias fitotóxicas; en los suelos pesados es complicado puesto que el vapor fluye muy lentamente a través del espacio poroso.
2. La solarización es otra técnica de desinfección del suelo. Ésta consiste en colocar plástico de polietileno transparente como una manta que cubre el suelo húmedo (sin cultivo), y es expuesto directamente al sol por un periodo entre 6 y 12 semanas, se calienta hasta temperaturas que son letales para los nemátodos y otros patógenos. Es una alternativa ecológica al uso de bromuro de metilo, sin embargo tiene fuertes limitantes como la cantidad e intensidad de la luz solar, la temperatura del ambiente y la profundidad del suelo, hay que considerar que entre 6 a 8 pulgadas pueden mantenerse temperaturas letales
3. Considerando al agua de riego como una posible vía de estrada de nemátodos, debe evitarse el uso de aguas de zanjas o estanques; incluso en aplicaciones de agroquímicos debe evitarse que se realicen con este tipo de aguas. De preferencia también debe evitarse la recirculación del agua, pues es una forma de dispersión muy rápida. Cuando se decida reutilizar el agua debe procurarse descontaminarla por calentamiento a unos 90 °C o más.
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Figura 4. Colocación de plástico trasparente para solarización del suelo. |
Otras prácticas en el manejo de nemátodos
El uso de variedades resistentes ha sido de las estrategias más exitosas, en este tipo de plantas los nemátodos no se desarrollan ni se reproducen con normalidad. Una excelente estrategia es injertar variedades sensibles en variedades resistentes, es el caso de tomate, berenjena y varias cucurbitáceas.
El control biológico de nemátodos sigue siendo aún tema de investigación, pero promete ser una de las principales estrategias de control contra nemátodos. Para más información leer el artículo “Control Biológico de Nemátodos Fitopatógenos” en Intagri.com.
Hasta el momento no se ha registrado un nematicida que sea lo suficientemente eficiente para no considerar otras alternativas en su control, por lo tanto, la producción en invernadero se debe programar considerando un buen manejo integrado de plagas y enfermedades.
Fuentes consultadas
Crow, W.T.; Dunn, R.A. 2012. Introduction to Plant Nematology. IFAS Extension. University of Florida. 5 p.
Noling, J.W.; Rich, J.R. 2012. Greenhouse Nematode Management, Florida Greenhouse Vegetable Production Handbook. Vol. 3. IFAS Extension. University of Florida. 6 p.
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